FUNGOFAR

Principio Activo: Ketoconazol,
Acción Terapéutica: Antimicótico

Cada comprimido contiene:
Ketoconazol 200 mg

FUNGOFAR comprimidos se presenta en cajas por 100 y 500 comprimidos.

Está indicado para el tratamiento de infecciones micóticas producidas por >em>Blastomices dermatitidis, Candida albicans, Candida carrioni, género Phialophora, Coccidiodes inmitis, Histoplasma capsulatum, Paracoccidiodes braziliensis, Sporothrix schenkii, y por géneros Epidermophytum, Trichophytum, Microsporum, Esporothrix; onicomicosis, perionixis, intertrigo, eczema micótico y muguet.

Administrar por vía oral la dosis indicada por el médico.
Adultos: 200 - 400 mg/día, dosis única o fraccionada cada 12 horas. Dosis máxima 1 g/día.
Niños menores de 2 años: no establecida. Mayores de 2 años, de 5 a 10 mg/kg peso corporal/día, dosis única o fraccionada cada 12 horas. La duración del tratamiento será según la evolución de la patología.

Hipersensibilidad a derivados imidazólicos. Insuficiencia hepática preexistente. Precauciones si se usa la aplicación tópica. Consultar con el médico si no hay mejoría en 2 a 4 semanas. Emplear medidas higiénicas para curar la infección y evitar la reinfección. En caso de utilizar la vía sistémica tener especial cuidado en alcoholismo, insuficiencia hepática, aclorhidria, embarazo; la lactancia se debe discontinuar hasta 48 horas después de concluir el tratamiento.

Vía sistémica: hepatotoxicidad, epigastralgia, astenia, náuseas, vómitos, diarrea, mareos, somnolencia, reacciones de hipersensibilidad, ginecomastía, disminución de la líbido, fotofobia, disminución de secreción de ACTH y testosterona.