LIBBERA

Principio Activo: Levocetirizina,
Acción Terapéutica: Antialérgico

Cada 5 mL contiene:
Levocetirizina diclorhidrato 2,5 mg
Excipientes c.s.p.

Caja con 1, 25, 50 y 100 frascos x 30, 45, 60, 75, 90, 100 y 120 mL

LIBBERA está indicado para el alivio sintomático de alergias, tales como fiebre de heno y urticaria.

Dosis niños entre 2 a 6 años: 0,125 mg por kilogramo de peso corporal, dos veces al día.
Dosis niños mayores de 6 años de edad: 5 mL (2,5 mg) dos veces al día o, 10 mL (5,0 mg) una vez al día.
Nota: - 5 mL (2.5 mg) equivalen a 1 cucharadita de medida. - 1 mL de Libbera Jarabe equivale a 0.5 mg y corresponde a un niño de 4 kilogramos de peso corporal.

LIBBERA está contraindicado en pacientes con hipersensibilidad conocida a cualquiera de sus componentes, también en pacientes con deterioro renal severo.
Riesgo – beneficio debe ser considerada cuando los siguientes problemas médicos existen:
Obstrucción del cuello de la vejiga.
Síntomas de hipertrofia prostática.
Predisposición a la retención urinaria (el efecto colinérgico precipita o agrava la retención urinaria).
Glaucoma de ángulo cerrado (el efecto anticolinérgico de midriasis generado por el aumento de la presión intraocular, precipitando un ataque de glaucoma a ángulo cerrado).
Glaucoma de ángulo abierto (el efecto anticolinérgico de midriasis puede causar un aumento leve en la presión intraocular; la terapia de glaucoma puede necesitar ser ajustado).

Ocasionalmente puede presentarse en forma leve y transitoria las siguientes reacciones adversas: cefalea, mareos, somnolencia, agitación, sequedad bucal, malestar gástrico e hipersensibilidad.
La somnolencia es un efecto adverso significativo, la mayor parte de los 3 antihistamínicos de primera generación los poseen, aunque el estímulo paradójico pueda ocurrir raramente, especialmente con dosis altas o en niños y en personas de edad avanzada. La somnolencia puede disminuir después de unos pocos días de tratamiento y es considerablemente menos problema en los antihistamínicos de última generación. Dentro de los efectos adversos más comunes en los antihistamínicos de primera generación se incluyen el dolor de cabeza, deterioro psicomotriz, y los efectos antimuscarínicos como retención urinaria, boca seca, visión borrosa y trastornos gastrointestinales.
Otros de los efectos adversos de los antihistamínicos incluyen palpitaciones y arritmias, hipotensión arterial, reacciones de hipersensibilidad (incluyendo broncoespasmo, angioedema, anafilaxia, rash cutáneo y fotosensibilidad), efectos de extrapiramidales, mareo, visión borrosa, confusión, depresión, disturbios del sueño, tremor, convulsiones, parestesias, discrasia sanguínea, disturbios gastrointestinales, y disfunción hepática (hepatitis colestásica, anormalidades de la función hepática).
Advertencias: Los estudios a largo plazo en animales donde se trata de evaluar carcinogénesis, tumorogénesis, o del potencial mutagénico de la mayoría de los antihistamínicos no se ha realizado.
Embarazo y reproducción: No se recomienda el uso de LIBBERA durante el embarazo.
Lactancia: La Levocetirizina se excreta en la leche materna, por lo cual no se recomienda el uso de LIBBERA durante el periodo de lactancia.
Cantidades pequeñas de antihistamínicos se distribuyen en la leche materna; el uso no es recomendado a causa del riesgo de efectos adversos; a excepción del entusiasmo o la irritabilidad, en niños.
Pediátricos: No existe información sobre los efectos de la Levocetirizina en niños menores de 2 años de edad. La seguridad y eficacia no ha sido establecidas, por lo que no está indicado su uso en este grupo etáreo.
La utilización no es recomendada en niños recién nacidos ni prematuros porque este grupo etáreo tiene una susceptibilidad aumentada a efectos anticolinérgicos, excitación del SNC, y una tendencia aumentada hacia las convulsiones. Una reacción paradójica caracterizada por hiperexcitabilidad puede ocurrir en niños que toman antihistamínicos.
Geriatría: Mareo, sedación, confusión e hipotensión pueden ser más probables de ocurrir en pacientes geriátricos que toman antihistamínicos. Una reacción paradójica caracterizada por hiperexcitabilidad, puede ocurrir en pacientes geriátricos que toman antihistamínicos. Los pacientes geriátricos están especialmente susceptibles a los efectos anticolinérgicos de los antihistamínicos, tales como la sequedad de boca y retención urinaria (especialmente en varones). Si estos efectos anticolinérgicos ocurren y continúan o son severos, la medicina se debe discontinuar. No existen datos que sugieran la necesidad de reducir la dosis en ancianos.