Presentación
ZITROMIN® 500 mg Comprimido recubierto, caja po 3 comprimidos.
ZITROMIN® 1 g Comprimido recubierto, caja por 1 comprimido.
ZITROMIN® 200 mg Polvo para suspensión, caja con 1 frasco por 30 ml con diluyente y jeringa dosificadora.
Indicaciones
ZITROMIN® está indicado en las infecciones causadas por organismos susceptibles como ser en infecciones por gérmenes productores de betalactamasa como: Estafilococos, Estreptococos, H. Influenza, Moraxella catarralis, Infecciones por Gonococo, H. Ducreyi, C. Trachomatis, U. urealyticum, M. aium, y en infecciones por enterobacterias.
Dosificación
Dosis adultos: En el tratamiento de las infecciones de las vías respiratorias altas y bajas, de la piel y de los tejidos blandos, y de las infecciones odontoestomatológicas: 500 mg por día, durante 3 a 7 días. Para el tratamiento de las enfermedades de transmisión sexual, causadas por cepas sensibles de Chlamydia trachomatis y la úlcera genital (chancroide) causada por Haemophilus Ducreyi: 1 g administrado como dosis única. Uretritis y cervicitis causadas por Neisseria gonorrhoeae: 2 g administrado como dosis única.
Dosis pediatrica: Se recomienda una dosis diaria de 10 mg/kg en 1 sola toma durante 3 a 7 días.
Vía de administración: Oral
Modo de empleo: ZITROMIN® Polvo para suspensión. Preparación de la suspensión: Para reconstituir la suspensión, vierta el contenido del frasco con el diluyente en el envase con el polvo para suspensión.
Una vez preparada la suspensión mantiene su eficacia por 7 días en refrigeración.
AGITESE ANTES DE USAR.
Reacciones Adversas
ZITROMIN® es bien tolerado con una baja frecuencia de efectos colaterales cuando es administrada a dosis establecidas, entre los efectos adversos tenemos: Anorexia, náuseas, vómito, diarrea, heces blandas, mareos, vértigo, dispepsia, malestar abdominal, estreñimiento, flatulencia, colitis pseudomembranosa y en raras ocasiones, cambios en la colaboración de la lengua.
En casos aislados se puede presentar trombocitopenia, anormalidades en la función hepática incluyendo hepatitis e ictericia colestática, convulsiones (observados con otros macrólidos) cefalea, somnolencia, parestesia, hiperactividad, prurito, rash, fotosensibilidad, edema, urticaria y angioedema.
Se ha informado deterioro de la audición con antibióticos macrólidos. Ha habido informes de deterioro auditivo, incluyendo pérdida de la audición, sordera y/o tinnitus en muchos pacientes que reciben azitromicina, muchos de éstos han sido asociados con el uso prolongado y en dosis elevadas